Ivelét - La necedad de los tontos
DESCARGAR PDF 0.00 KB 110 descargas“1Una mosca muerta hace heder al perfume del perfumista. Así una pequeña locura al que es estimado como sabio y honorable. 2El corazón del sabio se inclina a su diestra; pero el corazón del necio, a su siniestra. 3Aun mientras va de camino le falta cordura al necio; a todos va anunciando que es necio. 4Si el ánimo del príncipe se alza contra ti, no dejes tu lugar, porque la mansedumbre apacigua grandes ofensas. 5Hay un mal que he visto debajo del sol, como yerro que procede del soberano: 6El necio encumbrado en un alto cargo, Mientras los dotados permanecen humillados. 7He visto siervos a caballo, Y príncipes andando a pie como siervos. 8El que cava un hoyo caerá en él, Y el que rompa el cerco lo morderá una serpiente. 9El que corta piedras se lastimará con ellas, Y el que parte leños peligra en ello. 10Si el hierro está embotado, Y uno no lo afila, Hay que aplicar más fuerza. Lo provechoso pues es emplear la sabiduría. 11Si la serpiente muerde antes de ser encantada, De nada sirve el encantador.” —Eclesiastés 10.1–11, BTX